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Suspiro Limeño: receta e historia de un postre celestial



Lima es, tradicionalmente, una ciudad aficionada los dulces y postres. Los casi 250 postres de la cocina criolla del Perú conquistaron especialmente los paladares más exigentes de los Limeños de antaño, incluyendo los tradicionales Picarones, las deliciosas Mazamorras hechas de maíz morado o calabaza que se deben acompañar con un Arroz con leche. Pero el postre más gustoso, delicado y delicioso es el Suspiro Limeño o Suspiro de Limeña.

El origen de este postre se remonta hasta hace dos siglos en la ciudad de Lima, aunque en ese momento se le llamaba Manjar Real del Perú. No fue sino hasta que el poeta José Gálvez Barrenechea le dio el nombre que hoy sustenta, según él porque el postre es suave y dulce como el suspiro de una mujer, descripción seductora y palabras inspiradoras para un postre igual de cautivador.

El ingrediente principal de este delicioso postre, que se ganó un lugar al tope de mi lista la primera vez que lo probé, es el manjar blanco, ingrediente común de origen medieval introducido en el Perú por los viajeros provenientes de España. El manjar blanco fue presentado como una crema espesa compuesta de leche, almendras y azúcar que le da ese aire suave al postre.

Otro ingrediente característico de Suspiro de Limeña es el merengue, también introducido al país por los españoles, y que le da la fina dulzura que particulariza el placentero postre.

Receta de Suspiro Limeño

¿Ya estás listo para cocinarlo en tu casa y disfrutarlo esta noche? Entonces debes ir buscando:

• 2 tazas de leche condensada.
• 2 tazas de leche evaporada.
• 4 yemas de huevo.
• 4 claras de huevo.
• 300 gramos de merengue.
• Canela en polvo.
• 1 pocillo de vino dulce para cubrir el merengue.

La elaboración es muy sencilla, en tan solo 3 pasos obtienes un delicioso Suspiro Limeño:

Paso 1: Se deben poner las dos leches en una olla de doble fondo con el fuego bien bajo (ideal si la olla es de cobre), se cuece muy lentamente revolviéndose de vez en cuando con una cuchara de madera hasta que se pueda ver el fondo de la olla, obteniéndose un manjar blanco con consistencia y espesura.

Paso 2: Retirar del fuego la olla y agregarle las yemas batidas sin dejar de mezclar, dejándolo cocinar durante 7 minutos más, luego verter en recipientes de cristal sin llenar hasta el borde y dejar enfriar.

Paso 3: Hacer un almíbar con el azúcar y el vino dulce. En otro recipiente batir las claras a punto de nieve, agregarle el almíbar sin dejar de batir y terminar de cubrir las copas donde se puso el manjar blanco dándole la forma deseada, por último espolvorear con la canela.

Así obtendrás un Suspiro Limeño sin igual, con el sabor irresistible del manjar blanco y el merengue con almíbar. ¡Buen provecho!