Palermo

Con más de 40 años desde que abrió sus puertas, en Balconcillo, Palermo representa una tradición en cuanto a sánguches peruanos. Sus chicharrones y butifarras de jamón del país -preparados frente al cliente- son tan populares hoy como el primer día. Cada pieza lleva 90 gramos de carne y, un buen fin de semana, llegan a vender hasta 20 Kg. de chicharrón. También encontramos en la pizarra asado, sánguche de pollo, cafés y chicha. Para el postre, algo tradicional como mazamorra o crema volteada.

Este local es para comer al paso. No hay mesas, solo una barra que puede recibir hasta 30 personas codo a codo. Si viene a la sanguchería debe respetar las reglas de la casa. Es la única sede donde el chicharrón no se acompaña con camote. Una tradición que viene desde sus orígenes y no ha cambiado con el pasar de los años. La gente de La Victoria ya la conoce y se ha acostumbrado a ella. Ojo: llegue a tiempo pues todos los días cierran de 2 a 3:30 p.m.