El arrecife de Mamafé

Al ver su cebiche de cecina muchos le preguntan a doña Felicita Gutiérrez si su familia proviene de la selva, pero ella es 100% apurimeña. La ocurrencia del plato fue producto de la creatividad además de un trabajo de prueba y error. En el 2015, El arrecife de Mamafé participó en Mistura y rayó con este platillo. El año previo había formado parte de su carta y lo sacaron porque nadie le daba bola. Es cierto, aún le faltaba un ingrediente clave (antes lucía camote en lugar de los actuales patacones); pero también nos encontramos ante un público tímido. Hasta que prueba la buena sazón y ya no la suelta.

Hasta inicios del 2000, doña Fe tenía su peluquería en Comas con un amplio jardín al fondo. Un día, un joven cocinero le pidió que le alquilara esta parte del local para poner su negocio, pero ella prefirió contratarlo. Así comenzó la historia del restaurante: con una sombrilla, un par de mesas, anticuchos y dos platos más. Con los años las mesas se incrementaron y entró un nuevo cocinero quien le enseñó desde una buena condimentación hasta la decoración de un plato. En esos años, tomó la difícil decisión de cerrar la peluquería (¡su trabajo por 15 años!) para darle más espacio al restaurante.

Fue la mejor elección. Empezó a crear sus propios platos y en el 2012 participó en la feria Invita Perú donde su cebiche fue premiado. La carta que nos ofrecen ahora es extensa, ideal para satisfacer cada uno de nuestros antojos: hay cebiches y tiraditos, piqueos, chicharrón y arroces, sudados y chupes, pescados enteros y filetes, platos criollos, regionales y más. Para tener en cuenta: los cebiches y chicharrones se sirven en porción personal, mediana, extra y familiar. A cualquier plato de arroz, más S/.4, se le añade una leche de tigre. ¿Se apuntan?